El tercer Equipo Olímpico de Refugiados, esta vez el de mayor concurrencia, ingresó este sábado a la Villa Olímpica con 36 atletas de varios países para competir en 12 deportes dentro de una semana en los Juegos de París, y por primera ocasión con dos cubanos en su nómina , uno de ellos el único campeón olímpico en el roster.
La presencia del EOR ha gozado de una gran atención mediática que mucho espacio le ha dedicado a los dos cubanos, especialmente al cienfueguero Fernando Dayán Jorge que integró junto a Serguey Torres la dupla que ganó la prueba de C2 1000 en Tokio, primer oro para el canotaje cubano en Juegos Olímpicos. En su haber figuran también cuatro medallas de plata y dos de bronce en las pruebas de C2 1000 y C1 5000 en campeonatos mundiales, más un oro y una plata en los Juegos Panamericanos de Lima-2019.
El pesista Ramiro Mora, que trabajaba en un circo en Gran Bretaña, es el otro cubano en ese plantel, que también será un reflejo del problema migratorio que azota a la llamada «Mayor de las Antillas».
El COI espera que el EOR al lograr visibilidad durante su presencia en París también «llamará la atención sobre las numerosas crisis de desplazamiento en todo el mundo, presentará una imagen positiva de los refugiados y creará conciencia sobre el papel que el deporte puede desempeñar para apoyar a los más de 100 millones de personas desplazadas en todo el mundo».
La presencia de los dos atletas cubanos también atraerá la atención en París sobre el éxodo récord disparado en la nación caribeña en los últimos tres años, con un número inédito de fugas de deportistas en activo y en retiro especialmente hacia la Unión Americana.
Como era de esperar, el gobierno cubano reaccionó, aunque tardíamente, a la postura del COI. Tras una reunión del Comité Olímpico Cubano y el Instituto estatal de deportes (Inder), se utilizó como en otras ocasiones a un vocero de un medio oficialista para suscribir en un artículo el disgusto especialmente por la inclusión del monarca olímpico Dayán Jorge. Hasta se llegó a escribir que el COI y la agencia de la ONU para los refugiados, Acnur, «se hacen cómplice de la política agresiva y criminal de Estados Unidos contra Cuba».
Pero no consta que sobre la mesa del presidente del COI haya llegado una nota formal de protesta del COC o de cualquier otra representación institucional de la Isla. La diatriba al parecer sólo tenía la intención de «marcar» y evitando un indeseado enfrentamiento directo con el mandamás del COI.
Si se pretende la defensa firme de los principios entonces habría que esperar que la cubana miembro del COI María Caridad Colón pida la palabra en la Asamblea General del COI previa al inicio de los Juegos, y que los funcionarios del COC y del Inder aprovechen el escenario mediático de Paris para además quejarse por «robo de talentos» como lo ilustra que más de 20 atletas cubanos emigrados estén en la Ciudad Luz representando a otras banderas.
Lo que sí se conoce es que este viernes los dirigentes del INDER se dieron un gran abrazo con Thomas Bach en la Villa Olímpica , según texto y foto en el sitio oficial del organismo cubano, «Jit’. El funcionario alemán intercambió opiniones sobre la organización y sobre la preparación del luchador Mijaín López, a punto de conseguir su quinto oro en la historia olímpica. Mientras, los cubanos agradecieron el; gesto «asi como la contribución del COI al equipamiento suministrado por la empresa Adidas a la delegación de la Isla». Y todo el mundo contento,y nada de protestas.
Dayán Jorge en marzo de 2022 abandonó en México una base de entrenamiento para cruzar la frontera con destino a Miami.
Al llegar a la llamada «capital del exilio cubano» el cienfueguero confirmó que su sueño era representar a la selección de las barras y las estrellas para darle un oro olímpico a la nación que lo había acogido.
En sus primeras declaraciones, dadas a un canal de la televisión hispana, comentó que tras cruzar el Río Bravo se entregó a un oficial de Inmigración y tras ser liberado recibió el documento migratorio I-220 A, considerado un «parole condicional», una condición con la que se puede aplicar al asilo. Se desconoce cuáles fueron los pasos posteriores del atleta con sus abogados de Inmigración y si en la actualidad ya cuenta con la residencia permanente.
En ese momento, hace dos años, el conductor del programa televisivo que lo entrevistaba exhortó a Jorge a explorar la posibilidad de poder competir en una próxima Olimpiada bajo la bandera olímpica, al margen de las posibles presiones del gobierno cubano para impedirlo. Y ese sueño se hizo realidad, con el apoyo del Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos y del COI.
No es de extrañar que para los Juegos Olímpicos de Los Angeles en 2028 se le vuelva a ver pero entonces bajo la bandera estadounidense.
Los 36 atletas del equipo tienen estatus de refugiados en sus países anfitriones, verificado por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. Su composición fue aprobada por la Comisión Ejecutiva del COI, basándose en varios criterios que incluían el rendimiento deportivo de los atletas, sus países de origen, así como un equilibrio de deportes y género.
Varios analistas del mundo olímpico han comentado que tras el caso de Fernando Dayán Jorge podría abrirse la posibilidad para otros deportistas cubanos emigrados a la Unión Americana de competir también con Equipos de Refugiados en Juegos Panamericanos y Centroamericanos y del Caribe o en campeonatos internacionales.Con su reacción es lo que quizás esté tratando de obstaculizar el gobierno cubano.





