Desde su rincón en Miami, la actriz y comediante cubana Cuqui La Mora volvió a tocar el corazón de sus seguidores, esta vez con una publicación que no solo celebra un cumpleaños, sino también un viaje de amor y crecimiento que empezó hace justo 18 años. La artista, cuyo nombre real es Aleanis Jáuregui, compartió en su cuenta de Instagram un mensaje cargado de emoción con motivo de la mayoría de edad de su hija.
“Hoy hace 18 años que tuve a mi hija. Feliz cumple mi pedacito, mucha salud y bendiciones en tu vida. Te amo”, escribió la humorista, acompañando sus palabras con dos fotos que hicieron brotar suspiros entre quienes la siguen desde Cuba y la diáspora.
En una de las imágenes, aparece embarazada, vestida con un llamativo vestido rojo y una sonrisa luminosa que anticipaba lo que vendría. En la otra, sostiene en brazos a su bebé recién nacida, también hija del comediante cubano Jardiel González, en una escena íntima que transpira calor de hogar.
Las redes no tardaron en responder con cariño. Los comentarios fueron desde felicitaciones tradicionales hasta recuerdos nostálgicos de los tiempos en que Cuqui hacía reír en la televisión cubana con su estilo único. Muchos evocaron una de sus bromas más memorables del programa “¿Jura decir la verdad?”, donde fingía que su embarazo era solo una “indigestión”. Hoy, aquella “indigestión” ya es una mujer hecha y derecha.
El gesto de Cuqui no es nuevo. A lo largo de su carrera ha sabido entrelazar su vida profesional con momentos de su cotidianidad, abriendo una ventana sincera que la ha hecho aún más cercana a su público. Esa capacidad para mostrarse auténtica, sin disfraces ni poses, ha sido parte del encanto que la ha mantenido vigente, incluso luego de su mudanza a Estados Unidos y, más recientemente, tras obtener la ciudadanía estadounidense en marzo de este año.
Más allá del humor que la caracteriza, esta publicación dejó ver a la madre amorosa y orgullosa que hay detrás del personaje. En medio del torbellino de noticias, conflictos y memes que suelen inundar las redes, Cuqui apostó por la ternura. Y ganó. Porque a veces, una imagen con el vientre abultado y otra con un bebé en brazos dicen más que mil palabras.
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Los seguidores, muchos de ellos cubanos residentes fuera de la isla, se volcaron con comentarios como “Felicidades para tu princesa”, “Es igualita a ti” y “Esa foto me recuerda mucho la maternidad en Cuba, qué lindas”. Entre el cariño virtual se coló también el eco de una Cuba compartida en la memoria: el olor del talco, las cunas improvisadas, los nombres elegidos con ilusión. Una infancia que, aunque ahora transcurre en otro país, sigue conectada con sus raíces.
El cumpleaños número 18 no solo marca una cifra. Es también un símbolo de madurez, de ciclos que se cierran y nuevos que se abren. Para Cuqui La Mora, es la confirmación de que el tiempo ha pasado, pero el amor, como su humor, permanece intacto.
