Tres niñas de origen cubano han perdido la vida en circunstancias distintas y trágicas ocurridas en los últimos días, generando una profunda consternación tanto en sus comunidades como entre familiares y amigos que desde redes sociales han alzado su voz en duelo. Las historias de estas menores, cuyas edades oscilan entre los dos y los ocho años, han conmovido por la crudeza de los hechos y el vacío que dejan.
En el poblado de Bungo La Venta, en el municipio Contramaestre, Santiago de Cuba, una niña de cinco años falleció el sábado 26 de julio cuando una volanta —vehículo de tracción animal aún común en zonas rurales del país— se volcó con varios pasajeros a bordo.
El accidente ocurrió en horas de la tarde, provocando la muerte instantánea de la menor. Su abuela, que también viajaba con ella, resultó gravemente herida y fue trasladada al hospital provincial en Santiago. Otros ocupantes están hospitalizados en el Orlando Pantoja Tamayo, en Contramaestre.
La comunidad local está de luto, según reseña Reporte Cuba Ya, y exige medidas urgentes para regular este tipo de transporte, que a pesar de su precariedad, sigue siendo una de las pocas opciones de movilidad en la región.
La segunda tragedia se registró fuera de Cuba, en lo que parece haber sido un entorno más urbano y acomodado, pero no por ello más seguro.
Carolaen Aguilera, una niña de apenas dos años, falleció tras caer a la piscina de su casa. El hecho ocurrió también el 26 de julio y ha movilizado a decenas de personas cercanas a la familia, quienes intentan reunir fondos para el funeral mediante una campaña en línea en la plataforma Gofundme.
Su muerte ha sido descrita como un “golpe cruel” para sus padres y abuelos, quienes enfrentan ahora no solo la pérdida, sino también los retos logísticos y económicos de despedir a su pequeña. La página de recaudación expresa que Carolaen fue “un regalo del cielo”, y que su impacto en quienes la conocieron fue inmenso, a pesar de su corta vida.
Sus familiares aspiran a conseguir $20 mil dólares para el sepelio de la menor, de los que ya han recaudado 14 mil.
El tercer caso confirmado es el de otra niña de origen cubano, identificada por familiares como María Karla.
Aunque los detalles sobre el suceso que causó su fallecimiento no han sido esclarecidos públicamente, la noticia ha circulado ampliamente a través de mensajes de duelo compartidos por allegados, la mayoría de ellos residentes en la provincia de Sancti Spíritus.
Su tía, Deilys Quintana García, escribió un conmovedor mensaje en su perfil de Facebook donde la describe como «el ángel más lindo del universo» y lamenta la manera inesperada en que la pequeña partió. Vecinos y conocidos han reaccionado con incredulidad, recordando a la niña como una presencia alegre y querida en su entorno.
Los tres hechos, cada uno con sus propias circunstancias, exponen distintas realidades que atraviesan muchas familias cubanas dentro y fuera del país: desde la precariedad de los medios de transporte rural hasta los descuidos fatales en contextos más modernos. En común, todos dejan una estela de dolor, impotencia y llamados urgentes a prevenir que tragedias similares vuelvan a repetirse.
tal vez quieras leer: Comediante de las redes se equivoca al felicitar a Irela Bravo por su cumpleaños. Y cree que luego «se disculpó»
