Britney Spears, la inolvidable “princesa del pop”, ha vuelto a encender las redes con una foto que no deja nada a la imaginación.
En su publicación más reciente en Instagram, aparece completamente desnuda, mirando hacia una ventana, solo cubriéndose con unas botas altas hasta la rodilla y poniendo sus manos sobre su cabeza. Un pequeño emoji de rosa oculta estratégicamente sus partes íntimas. La cantante desactivó los comentarios, posiblemente para evitar opiniones negativas, pero así y todo el post reunió más de 200,000 “me gusta” en apenas unas horas. Actualmente cuenta con 270 mil «likes».
Aunque la foto, sin dudas, tiene un toque artístico, no es un hecho aislado que a muchos preocupa, pues Britney viene de una serie de publicaciones íntimas y provocadoras en los últimos días.
Apenas la pasada semana compartió un video cantando en pijama, en el que interpretó “Unfaithful” de Rihanna con un acento británico entrecortado, mientras su casa aparecía desordenada y había incluso rastros de descontento entre quienes la rodeaban, dice People. También se filtraron imágenes de ella bailando en alta mar con un bikini revelador, en otro video en el que hacía gestos sensuales frente a la cámara.
Por si fuera poco, la pasada semana publicó un video de ella bailando en el que se le ven los senos. La cantante, en lugar de quitar el video lo que hizo fue editarlo, y poner encima de sus pezones par de flores.
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La acumulación de estas publicaciones provocativas, algunas incluso eliminadas con prontitud, y el patrón errático de contenido han generado gran inquietud entre sus fans. Muchos se preguntan si no están ante una llamada de auxilio encubierta. En el pasado, Britney ya había sido objeto de cuatro verificaciones de bienestar («wellness checks») por parte de las autoridades, durante y después de su tutela legal, debido a su comportamiento público y sus publicaciones en redes.
Desde que recuperó el control de su vida tras la disolución de su tutela en 2021, Spears ha optado por dejarse ver de manera cada vez más cruda y directa.
Y aunque este nuevo desnudo no solo expresa una declaración de libertad corporal, también abre preguntas sobre su equilibrio emocional y psicológico. Mientras tanto, la atención vuelve a centrarse en una figura que trasciende su música: una mujer que sigue tejiendo su propia narrativa a través de la exposición pública.





