William Levy volvió a pisar suelo español y, como ya es habitual cada vez que el galán cubano-americano llega a la península, su presencia generó revuelo. El actor se encuentra en el país para promover “Bajo un volcán”, su más reciente proyecto, y aprovechó una cita con la prensa para hablar de lo que más disfruta de esta etapa profesional que lo mantiene frecuentemente conectado con España.
Durante una entrevista en la alfombra roja concedida a la revista Divinity, Levy no ocultó su entusiasmo por la gastronomía local. Con esa naturalidad que lo caracteriza, confesó cuánto lo seduce la cocina española:
“A mí me encanta la comida de acá, la comida es muy rica, cualquier comida para mí es rica, pero la comida de acá también es muy, muy buena. La verdad la disfruto mucho”, señaló el actor, dejando claro que cada visita le alimenta tanto el estómago como el ánimo.
Su relación con España no es nueva. En los últimos años, Levy ha filmado varias producciones en el país, consolidándose como uno de los rostros latinos más queridos por el público español. Ese vínculo afectivo parece haberse profundizado gracias al estilo de vida que encontró en el país, una manera de entender el día a día que, según él, marca la diferencia.
“Disfruto mucho la compañía que tengo acá, las amistades que tengo, la forma de vivir acá… La gente le gusta vivir. Aparte de trabajar, siempre hay tiempo de tomarse un vino, cenar con la gente que tiene cerca, y eso en muchos países no es así. Es trabajo, trabajo, trabajo, y no saben trabajar para vivir. Aquí la gente trabaja, pero vive, entonces hay mucha alegría. Me siento en casa”, afirmó, mostrando un cariño casi doméstico por la cultura española.
Lea más: William Levy frena a Raúl de Molina en pleno programa: “No confundas las cosas”
Sus palabras tocaron una fibra especial entre los seguidores de Divinity, quienes han seguido de cerca su recorrido audiovisual y personal. Desde las redes sociales de la revista reaccionaron con un guiño cargado de complicidad:
“Hay actores que pasan por España y otros que se quedan un poquito en ella cada vez que vienen. William Levy pertenece al segundo grupo. El cubano-americano ha vuelto, y esta vez lo hace con un brillo distinto”.
Ese “brillo distinto” parece tener mucho que ver con la etapa vital que atraviesa Levy, inmerso en nuevos retos profesionales, reconectado con el público europeo y agradecido por un entorno que lo hace sentir cómodo, acogido y, como él mismo dijo, “en casa”.
España, mientras tanto, sigue abriéndole las puertas con cariño. Y Levy, por su parte, continúa devolviendo ese afecto con gratitud, cercanía y la certeza de que, más allá de los sets de grabación, ha encontrado un lugar donde el ritmo de vida calza perfectamente con su manera de estar en el mundo.





