La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, indultó a “Six Seven”, un cerdito de solo seis semanas, durante la ceremonia anual de perdón en Latin Café 2000. El gesto, ya convertido en tradición navideña local, quedó inmortalizado en una foto tan tierna que muchos bromearon con que la alcaldesa lo había adoptado. El cerdito será enviado a un santuario, lejos de la caja china, mientras el evento vuelve a subrayar el peculiar equilibrio entre las costumbres culinarias de Miami y los guiños simbólicos al bienestar animal.
Decenas de cubanoamericanos se reunieron frente al restaurante Versailles, en Miami, durante el Día Internacional de los Derechos Humanos, para denunciar la represión en la isla y exigir la liberación de presos políticos. La protesta, marcada por consignas clásicas del exilio y el deterioro creciente de la vida en Cuba, buscó amplificar las voces de quienes dentro del país no pueden manifestarse sin enfrentar detenciones o vigilancia estatal.
Tres casos recientes han sacudido a Miami y comparten un patrón inquietante: hispanos en posiciones de confianza acusados de desviar millones de dólares. Desde la contable que presuntamente robó más de un millón a un concesionario de autos, hasta el abogado de Miami Lakes señalado por apropiarse de fondos de sus clientes, y el conocido promotor cubano Boris Arencibia, condenado por traficar medicamentos desviados, los expedientes delinean un mapa de fraudes que atraviesa la ciudad y golpea directamente a la comunidad latina.
El Miami Herald dedicó un editorial a la congresista María Elvira Salazar por criticar la nueva ofensiva migratoria de Donald Trump, una pausa generalizada de solicitudes de asilo, residencia y ciudadanía que ya está afectando a inmigrantes legales en el sur de Florida. Aunque el diario reconoce su postura como valiente dentro del Partido Republicano, cuestiona el silencio de otros dirigentes locales, especialmente cuando las medidas están interrumpiendo naturalizaciones y detenciones sin antecedentes. El editorial concluye que, en una comunidad levantada por inmigrantes, más voces republicanas deberían alzarse.
Un hombre hispano de 64 años fue arrestado en Miami tras apuntar con un arma a su vecino y acusarlo de ser “un espía ruso” mientras este estacionaba su carro. El caso se conoce casi al mismo tiempo que otra agresión captada en video, en la que un conductor hispano golpeó más de 20 veces a otro automovilista en plena I-95. Ambos episodios ilustran una escalada de violencia cotidiana en la ciudad.
Miami rompió casi treinta años de dominio republicano al elegir a Eileen Higgins como su primera alcaldesa. El giro abre interrogantes sobre si se trata de un voto de castigo a la agenda antiinmigratoria o del hartazgo con la clase política tradicional. La ciudad, mayoritariamente hispana, redefine así su mapa político en un momento clave para Florida.
El enfriamiento del mercado inmobiliario en Miami no solo obedece al fin del boom pandémico y al encarecimiento de las hipotecas: también influye la ralentización migratoria. Con menos recién llegados asentándose, un teletrabajo en retroceso y un clima político menos favorable para los inmigrantes, la demanda pierde presión y los precios comienzan a ceder después de años de escalada.
La cubana-española-estadounidense Ana de Armas termina el año a toda carrera y este domingo se le vio con estrellas del espectáculo que llegaron a los Emiratos Arabes Unidos y asistieron al climax de la Fórmula 1.
El fin de semana de Acción de Gracias marcó un nuevo envío humanitario desde Miami hacia el oriente de Cuba tras el paso del huracán Melissa. Catholic Charities coordinó un cuarto vuelo con 44 000 libras de alimentos y suministros básicos destinados a diócesis fuertemente afectadas, reafirmando un puente solidario que la Iglesia de Miami mantiene desde hace décadas.
Con el tiempo, este modo de hablar ha cargado también con estigmas. Para algunos, suena “incorrecto”; para los lingüistas, es una prueba de que las lenguas cambian cuando cambian las ciudades. Llamarlo Miami English es, en parte, una forma de reconocer que en esta ciudad el inglés también tiene acento migrante, historia propia y derecho a existir sin disculpas.
los forenses encontraron no solo restos de comida sin digerir, sino también elementos extraños: cáscaras de huevo y plumas en el estómago del menor, señal de que el pequeño había estado ingiriendo objetos sin supervisión. Esos hallazgos ya sugerían negligencia, pero la pieza definitiva llegó con el informe toxicológico.
Con el testimonio de los empleados y del propio residente agredido, la policía terminó trasladando a Osvaldo Nieves al Jackson Memorial Hospital para una revisión médica y luego al centro de detención del condado. Los registros carcelarios muestran que enfrenta un cargo de agresión agravada contra una persona de 65 años o más, un delito especialmente grave en Florida. Su fianza fue fijada en 7 500 dólares.