Mientras la familia de Yamila Zayas exige justicia y tres niñas quedan huérfanas, el intento de asesinato en la capital yumurina evidencia que la prevención temprana, las órdenes de protección, los canales de denuncia y la transparencia no pueden seguir esperando. Con 32 feminicidios verificados en 2025 y casos en curso como el de Matanzas, la urgencia es ineludible: proteger a las víctimas y cerrar el paso a la impunidad.
La opacidad informativa del régimen colisiona con su falta de rigor a la hora de informar y reconocer el feminicidio como delito. Un caso en Torriente, Jagüey Grande, no esclarecido, ni siquiera con la captura del presunto asesino.
Bajo el nombre Con Todos La Victoria, el perfil publicó cuatro notas separadas en las que atribuye a la Policía la detención de presuntos implicados en hechos ocurridos en Matanzas (ciudad), Cárdenas y Jagüey Grande.
Que en esta ocasión no haya que lamentar víctimas es un alivio. Pero el humo que ayer se elevó sobre los techos de San Juan de Dios es recordatorio tangible de que cada apagón prolongado trae consigo una cadena de decisiones de alto riesgo.
No es la primera vez que ocurre algo así en los Cayos: el uso de barcos pesqueros hurtados en Cuba para viajes ilícitos hacia Florida se ha repetido con distintas variantes, y en varios expedientes previos los dueños lograron acreditar la sustracción y obtener la devolución tras semanas o meses de trámites.
desde 2016, cuando Gastronomía entregó el inmueble a Artes Escénicas, el lugar NUNCA recibió mantenimiento constructivo. Nueve años después, las humedades en techo y paredes, el moho del agua filtrada y el desgaste del mobiliario cuentan mejor que nadie lo que ocurrió en el ínterin.
Tres historias distintas, unidas por la constancia, la entrega y el amor al prójimo. La doctora Magda Cortina en Camagüey, y los profesores Alexis y Ernesto Texidor en Matanzas y Santiago, dejan tras de sí la estela de vidas dedicadas a enseñar, curar y acompañar. Su ausencia se siente ya en hospitales y escuelas, pero también en la memoria de quienes los conocieron y aseguran que su obra seguirá viva.
los organizadores confirmaron que no hubo lesionados, algo que muchos calificaron como “un milagro” dadas las imágenes del impacto. El incidente reaviva el debate sobre la seguridad en este tipo de eventos automovilísticos que, aunque congregan multitudes, carecen de condiciones profesionales para garantizar la integridad de los participantes.
Apenas en febrero pasado, la revista independiente Alas Tensas recogía la denuncia de la familia de Esperanza Cabrera Melvin, una mujer de 75 años desaparecida en Colón, Matanzas, desde diciembre de 2024.