Quienes estén en condiciones de salud aptas para donar deben acudir al banco de sangre u hospital más cercano con su carné de identidad y mencionar que la donación es para Leandro Sánchez (indicar el nombre completo en admisión). En Cuba, de forma general, se aceptan donantes entre 18 y 65 años, con peso igual o superior a 50 kg, sin fiebre, infecciones recientes ni tratamientos antibióticos o procedimientos invasivos de las últimas semanas. Personas con enfermedades crónicas no controladas o embarazadas suelen quedar excluidas. Ante dudas, el personal sanitario realiza una evaluación rápida en el sitio.
Sin aventurar diagnósticos, los testimonios apuntan a un cuadro compatible con enfermedades transmitidas por mosquitos y cuadros gastrointestinales asociados a agua no segura. En contextos así, las recomendaciones comunitarias básicas son: eliminar criaderos (vaciar recipientes y charcos en patios y azoteas), usar repelente y mosquiteros, potabilizar el agua (hervirla cuando sea posible) y buscar atención médica ante fiebre sostenida, vómitos persistentes, decaimiento extremo o signos de deshidratación, especialmente en niños y embarazadas. Vecinos de Matanzas insisten en hidratarse y evitar automedicarse cuando se sospeche dengue, a falta de indicación profesional.
La madre detalla una secuencia de gestiones sin resultados: primera entrevista el 25 de agosto “inconcluyente”; regresos el 15 y el 24 de septiembre sin ser atendida; y, finalmente, el 30 de septiembre, una reunión con una comisión encabezada por un teniente coronel de la Fiscalía —“sin competencia directa en el hecho”, señala— y otros oficiales que no eran los responsables del puesto ni los mandos inmediatos del conscripto. En esa cita, dice, le hablaron de “transparencia”, pero los principales jefes no acudieron y las explicaciones “carecieron de sustento”.
La Güinera, en el municipio Arroyo Naranjo de La Habana, está atravesada por el dolor. Vecinos y allegados confirmaron en redes sociales el hallazgo...
Un embotellamiento que algunos dicen fue de tres horas, otros de cuatro y algunos de cinco, pudo ser perfectamente prevenido por las autoridades de La Habana
Los dos sucesos, contados por Licea y amplificados por comentarios de residentes, vuelven a colocar el foco en la fragilidad de la seguridad cotidiana y en la necesidad de respuestas institucionales rápidas y transparentes. Mientras se conocen más precisiones, las denuncias recogidas por el influencer funcionan como alerta vecinal y como pedido de información a cualquier persona que pueda ayudar a esclarecer lo que ocurrió.
La protagonista, la española Ana Hurtado —activista afín al régimen, autodefinida durante años como “actriz y periodista”— contó que quiso pagar toda la cuenta por Transfermóvil, pero le exigieron mitad en efectivo y mitad por transferencia. Como no llevaba cash, se quedó sin cenar.
De momento, todo apunta a un episodio donde el rumor corre más rápido que la información oficial. Lo responsable, para las autoridades, sería aclarar si se trata de ejercicios rutinarios, actualización de expedientes o algo más. Y para los convocados, exigir por escrito el motivo, la duración y el estatus de la citación. En un país exhausto por apagones y carencias, cualquier insinuación de “movilización” tiene un eco político y emocional difícil de contener.
La situación energética en Cuba es tan grave, que no hay corriente ni para echar a andar las plantas que mueven el agua dentro de las ciudades. A la falta de alimentos y electricidad se suma la carencia de agua.
Un recluso fugado de la prisión de Ceiba, identificado en alertas ciudadanas como Arisbel Cabeza Reyes, es buscado con carácter de urgencia tras una...
Mientras familiares y testigos siguen reclamando justicia y transparencia, lo urgente es que las autoridades amplíen la información básica del caso: identidad del detenido, calificación provisional de los delitos, estado de salud de los lesionados y garantías procesales. Esa claridad no solo desactivaría el carrusel de versiones en internet; también blindaría el derecho de las víctimas a conocer la verdad y el de cualquier investigado a no ser condenado en la plaza pública antes de que hable un tribunal.
La alarma por casos de desapariciones de cubanas dentro y fuera del país vuelve a sacudir las redes sociales, esta vez con dos historias que han comenzado a circular en las últimas horas y que dejan más dudas que certezas.