Maite Rodríguez Agramonte intenta, desde hace casi dos años, recomponer el rastro de su hija en una ciudad que solo conoce por fotos y direcciones sueltas: Las Vegas. Su hija, la cubana Yenia Pérez Rodríguez, está desaparecida y la madre ha recurrido a todo lo que tiene a mano para encontrarla: conocidos, redes sociales, instituciones internacionales y la solidaridad de otros cubanos en Estados Unidos.
La casa de Mailyn es un pasillo de mensajes, llamadas y portazos al silencio. Ella pide que, si alguien ve el carro rojo o sabe algo de Alexander Aguilera Becerra, avise. Pide, en el fondo, lo mismo que pide todo pariente que no encuentra: acción. Rastros en cámaras, llamadas invertidas, consultas a talleres y parqueos, visitas a hospitales y policlínicos. Y pide, también, lo que solo puede darle la policía: una investigación que empiece ya, que comunique cada paso y que no se oculte tras la palabra “esperar”.
El aprendizaje inmediato en el caso de Yailén de los Santos es inequívoco: cuando fallan los resortes formales, la comunidad se organiza y empuja. Queda por ver si, ante la evidencia acumulada de casos similares, el consulado y la embajada cubana en Moscú corrigen el rumbo, activan canales de emergencia reales y devuelven a sus ciudadanos la confianza que merecen.
La Güinera, en el municipio Arroyo Naranjo de La Habana, está atravesada por el dolor. Vecinos y allegados confirmaron en redes sociales el hallazgo...
La noticia golpeó con fuerza al país. Geosvany, un joven trabajador del sector turístico y chofer de Transgaviota Centro, residía en Caibarién con su esposa embarazada. Esperaban a su primer hijo, y la revelación del sexo estaba prevista para los días posteriores al crimen. “Representa una tragedia inconmensurable”, escribieron medios oficiales al evocar su recuerdo.
La familia ha pedido ayuda a la comunidad para encontrar a la joven, quien lleva seis días desaparecida. Esta desaparición se suma a otros casos preocupantes de menores desaparecidos en Cuba en los últimos meses. La comunidad cubana en redes sociales muestra su solidaridad con la familia y exige una pronta resolución del caso. Mientras tanto, se espera que la difusión de la información contribuya a encontrar a la adolescente y reunirla con su familia lo antes posible.