Más de 600 000 cubanos han iniciado trámites para obtener la ciudadanía española bajo la Ley de Memoria Democrática, una cifra muy superior a lo previsto inicialmente por las autoridades españolas y que presiona a un sistema consular ya saturado.
El programa EB-3 es beneficioso tanto para las empresas, que obtienen empleados trabajadores y potencialmente a largo plazo, como para los inmigrantes, que obtienen la oportunidad de trabajar, vivir y eventualmente convertirse en ciudadanos de los Estados Unidos.