La presunta deserción del judoca peso pesado Jonathan Delgado elevó a cinco los abandonos de atletas de la delegación cubana a los II Juegos Panamericanos Junior de Asunción, Paraguay, a cuatro días de su clausura.
La política informativa sobre las fugas de deportistas cubanos ha sido marcada por la falta de política: en la prensa oficial unas veces se informa, otras veces la afición deportiva de la Isla se entera por redes sociales o medios alternativos fustigados por el gobierno. La cita guaraní ha estado signada por el mutismo sobre las escapadas.
La primera fuga masiva en territorio paraguayo debió haber molestado con creces a las autoridades. Cuatro al tiro. Tres remeros y una balonmanista no se presentaron en el hotel ni en el aeropuerto para tomar el vuelo de regreso de La Habana ni en el acto que organizó el Inder, el Comité Olímpico Cubano y la Embajada para celebrar el aniversario 99 del desaparecido Fidel Castro.
Los que no estaban «desaparecidos» eran los miembros del equipo de ocho con timonel, medallistas de bronce, Robert Landy Fernández, Félix Puente Batista y Keiler Ávila Núñez, y la balonmanista Suannet de la Caridad Nápoles. En los 66 años de Revolución todos los casos de atletas en el extranjero reportados en las comisarias como desaparecidos han resultado escapados de las delegaciones oficiales.
Nunca hasta la fecha se ha dado el caso de un secuestro sino de cubanos que han puesto pies en polvorosa.
Al grupo de «escabullidos» en la actualidad en algún sitio de Asunción se ha sumado el judoca Delgado en espera al parecer, todos, de que toda la expedición deportiva se regrese a la Isla, para acercarse a la Comisión Nacional de Apátridas y Refugiados (CONARE) para iniciar el proceso legal y obtener el reconocimiento como refugiados.
Por supuesto que deben estar informado que otros atletas cubanos han logrado naturalizarse en un país cercano como Chile y ya han representado a «La Roja» o están a punto.
Antes de Asunción, en la última incursión de una delegación cubana a juegos multideportivos en Sudamérica, los Juegos Panamericanos de Chile en noviembre de 2023, se reportó la deserción de nueve deportistas cubanos, seis integrantes del equipo femenino de hockey, un corredor de vallas, un remero y un balonmanista.
A principio de este mes de julio se conoció que el nadador paralimpico cubano, Yunerki Ortega, quien escapó de la delegación antillana durante los Juegos Parapanamericanos de Chile a fines de 2023, recibió la nacionalidad chilena.
No se descarta entonces en un futuro cercano ver a los cubanos con camisetas paraguayas. Delgado, 19 años, es considerado de «muy talentoso» según los expertos antillanos a pesar de perder su primer combate en cuartos de final en más de 100 kilogramos, y caer frente al estadounidense Kanta Ueyama en el repechaje en estos II Juegos continentales, aunque contribuyó a la medalla de plata por equipos. Era de los ¨nuevos» en el equipo nacional y apenas tenía una o dos competencias en el exterior. No estaba entre las primeras figuras de ese peso liderado por el campeón mundial Andy Granda que decidió seguir hasta las clasificaciones a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles.
Delgado dio continuidad al éxodo de judocas cubanos; esta es la tercera deserción en lo que va de año tras las de Héctor San Román y Noemí Suárez durante el Campeonato Panamericano en Santiago de Chile en abril pasado. Las fugas masivas, las salidas de atletas reconocidos y entrenadores hacia otros países, los malos resultados internacionales y problemas internos, incluso escándalos en escuelas deportivas, han llevado a no pocos hablar de «crisis» en este deporte. Pero al margen, bienvenida la medalla de oro de la joven Dayanara Curbelo, una posible sucesora de la legendaria Idalys Ortiz.
Originalmente Cuba había anunciado oficialmente la inscripción de 231 deportistas pero la cifra quedaría en 230 al conocerse horas antes de la apertura de los Juegos que la saltadora de longitud Hayla González había decidido dejar la concentración en España.
