La influencer cubana Flor Danay Hernández, conocida como Flor de Cuba, vivió una amarga experiencia que decidió compartir con sus seguidores y colegas creadores de contenido en Internet para evitar que otros caigan en la misma trampa. Según contó, fue víctima de una estafa que le costó más de 4.000 dólares y que tuvo lugar a través de un engañoso correo electrónico que parecía provenir de la propia plataforma TikTok.

“Quiero hacer este video para alertar a todas las creadoras de TikTok Shop sobre una estafa en la cual yo caí hace dos semanas y me robaron más de 4.000 dólares de mi cuenta”, explicó en un video que rápidamente se viralizó en redes sociales, donde acumula una amplia comunidad de seguidoras.
El fraude comenzó cuando recibió un correo que simulaba ser una notificación oficial de TikTok, informándole que su cuenta había sido aprobada para recibir la insignia de verificación azul. El mensaje incluía un enlace que, al abrirlo, solicitaba sus credenciales de acceso. “El correo parecía completamente profesional. Cuando abrí el enlace, me pidió iniciar sesión y ahí me hackearon la cuenta automáticamente”, relató.
Lea más: Flor de Cuba desmiente rumores sobre un supuesto pasado delictivo en la isla
“Es la primera vez que me pasa algo así en siete años. Caí, tenía el mongo de guardia”, dijo. La maniobra coincidió con el día en que debía recibir su pago semanal por las ventas en TikTok Shop, lo que permitió a los estafadores cambiar el método de cobro y apoderarse de 4.300 dólares. “Fue cuestión de minutos. Cuando me di cuenta, ya el dinero había desaparecido”, comentó con frustración.
Flor de Cuba aseguró que reaccionó de inmediato y logró contactar al equipo de soporte de TikTok desde otras cuentas. La plataforma, tras verificar que el ingreso sospechoso provenía de Turquía y no de su dispositivo habitual, le devolvió el acceso en menos de 24 horas. Sin embargo, los fondos sustraídos no pudieron recuperarse.
Tras el incidente, la creadora recibió otros tres correos similares, todos con la misma apariencia profesional y el mismo objetivo: robar información personal. Por eso decidió advertir a otras usuarias sobre los signos que delatan un intento de fraude. “Una forma de saber que no es TikTok quien te escribe es revisar el correo. Si termina en @gmail.com, no es oficial. TikTok usa su propio dominio: @tiktok.com”, explicó.
Para cerrar su testimonio, la influencer envió un mensaje de alerta a toda la comunidad de creadores de contenido: “Mucho cuidado. Todo mi esfuerzo lo vi tirado por la borda ese día. Ojalá que nadie más pase por esto”.





