El Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) ha venido ofreciendo durante los últimos meses una primera impresión negativa a los viajeros que llegan a la ciudad.
Y a pesar de que la mitad de las pasarelas mecánicas están fuera de servicio desde hace tiempo al igual que varios elevadores; amén de algunos baños rotos y clausurados, fue el derrame de un liquido verde (de refrigeración) la pasada semana, lo que parece ser que ha impulsado a la ciudad a tomar cartas en el asunto.
MIA, ha sido el centro de atención tras la aprobación de una inversión de $600 millones destinada a modernizar su infraestructura. Un financiamiento que llega en un momento crucial, cuando el aeropuerto enfrenta críticas constantes que incluso, refieren, está por debajo del nivel que muestran algunos otros aeropuertos en América Latina, a pesar de que en el lugar pululan los letreros que prometen una modernización sin resultados aparentes.
«Estaría feliz sin la modernización, solo si funcionara», comentó la alcaldesa del condado Miami-Dade, la pasada semana.
Ante estas quejas, el comisionado de Miami-Dade, Kevin Cabrera, cuyo distrito incluye el MIA, defendió la necesidad de esta inversión durante la reunión del comité del aeropuerto. Cabrera expresó su compromiso con la transformación del MIA en un aeropuerto de primera clase, no solo en términos de carga y número de vuelos, sino en servicio al cliente y experiencia general.
«Desde mi primer día, he asegurado que necesitamos tener un aeropuerto de primera clase», afirmó Cabrera.
La ordenanza propuesta por Cabrera, que fue aprobada ayer miércoles, simplifica el proceso para asegurar fondos estatales destinados a las mejoras del aeropuerto. Además, incrementa la frecuencia de los informes sobre los avances de los proyectos de mejora.
Cabrera concluyó reiterando su compromiso con el bienestar de los pasajeros y la imagen del condado. «Sabemos que esto es lo primero que la gente ve cuando llega a nuestro condado y queremos asegurarnos de que sea una buena primera y última impresión», afirmó.
Con estos cambios en marcha, los pasajeros y visitantes de MIA pueden esperar mejoras significativas en los próximos meses, marcando un nuevo capítulo en la historia de uno de los aeropuertos más transitados de Estados Unidos.
Ralph Cutié, CEO y Director del Aeropuerto Internacional de Miami, explicó que MIA cuenta con más de 600 unidades de transporte, incluidos elevadores y escaleras mecánicas, que requieren partes personalizadas y fabricación específica.
«Un escalador o una pasarela móvil tiene más de 12,000 partes», señaló Cutié, anticipando la llegada de partes para las primeras unidades hacia finales de año.
La resolución también insta a la alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, a contratar una firma de ingeniería para evaluar toda la infraestructura de MIA. Según Cutié, el plan es modernizar 30 unidades por año, prometiendo una reducción visible de averías conforme avance el proyecto.
Todo gracias al liquido verde y un video viral
No se puede asegurar del todo pero, el video que se hizo viral durante el feriado del 4 de julio, donde se observaba un líquido verde fluorescente emanando de los techos del aeropuerto, debe haber sido la tipica gota que derramó la copa.
Este incidente, resultado de una tubería rota, fue rápidamente controlado y, según Greg Chin, portavoz del aeropuerto, no afectó las operaciones ni los vuelos. Este líquido, que provenía del sistema de aire acondicionado y está teñido para rastrear fugas, fue limpiado sin mayores consecuencias.
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