Un estallido descrito por autoridades como “catastrófico” sacudió el martes por la tarde un hogar de ancianos en Bristol Township, condado de Bucks, a las afueras de Filadelfia, provocando un colapso parcial del edificio, incendios y una operación de rescate que se extendió durante horas. El saldo inicial confirmado por el gobernador Josh Shapiro fue de al menos dos fallecidos y una veintena de personas hospitalizadas, mientras equipos de emergencia buscaban y evacuaban residentes entre humo, escombros y un persistente olor a gas, señala la agencia Reuters.
Los primeros reportes apuntan a una posible fuga de gas como detonante, aunque las autoridades han subrayado que se trata de una hipótesis preliminar.
Según la reconstrucción ofrecida por servicios de emergencia y citada por Reuters, se registraron dos explosiones: la segunda ocurrió poco después de la primera, en un momento especialmente peligroso, cuando bomberos acababan de salir tras extraer personas de zonas comprometidas, conscientes de la presencia de gas en el ambiente.
El episodio ocurrió mientras una cuadrilla de la empresa de servicios acudía al lugar tras reportes de olor a gas, un detalle que ahora forma parte central de la investigación. La compañía local informó que sus equipos estaban respondiendo al aviso cuando se produjo la explosión, y posteriormente se procedió al corte de gas y electricidad en el área como medida de seguridad, indicó por su parte AP News.
En medio del caos, se reportaron rescates realizados por bomberos y policías, además de la ayuda de vecinos que colaboraron en sacar a personas hacia zonas seguras. Con el correr de las horas, las autoridades indicaron que todos los residentes y el personal habían sido finalmente contabilizados, aunque el impacto sobre la estructura y las lesiones obligaron a mantener el operativo con maquinaria pesada y equipos especializados.



















