En apenas una línea, destapó la olla de grillos que muchos evitan mirar: los cientos, quizás miles, de cubanos que fueron enviados a cumplir misiones militares en África durante los 70 y 80 y que, a su regreso, recibieron más diplomas que ayuda material, y a los que se les prometió se les darían 1500 pesos pero nunca se los dieron.