Odaymar ha convertido su experiencia en un acto de resistencia y reivindicación: al resistir la imposición y obtener su pasaporte tal como se ve a sí mismo, envía un mensaje claro: la identidad trans es válida, legítima y “hermosa”. Que “Trans is beautiful” no sea solo un lema, sino una realidad visible, también en los trámites oficiales.
A raíz de la presión de los activistas de la comunidad LGBTQA+ en las redes sociales, las autoridades llevaron a las víctimas de vuelta al hospital para un nuevo examen médico.