La batalla legal de Drake contra su discográfica por “Not Like Us” termina —por ahora— en punto muerto. El fallo refuerza una máxima que los juristas repiten cuando el rap entra a los tribunales: el contexto importa. Y en un campo donde la exageración, el “trash talk” y las metáforas son parte del juego, no todo insulto rimado es difamación.
Recordemos que el músico estuvo grabando un documental en 2011 en Santiago de Cuba sobre los carnavales en este emblemática ciudad y dos años más tarde, en 2013, fue nominado al Premio Cubadisco.