La gran lección de Melissa —y quizás la más dolorosa— es que la resiliencia cubana existe, pero no puede seguir siendo la única política pública que funcione. La ayuda internacional y los esfuerzos privados están parcheando huecos que deberían estar cubiertos por un sistema robusto de prevención y recuperación. La gente está salvando a la gente, como siempre. Y eso es admirable. Pero también es una señal de alarma.
Artistas e influencers cubanos en Miami —Bryansito, Wow Popy, Zurdo y Bebeshito— reúnen y envían donativos para familias del oriente afectadas por Melissa.
Emily Estefan declaró por videollamada en Miami y pidió “no quería que fuera a la cárcel” y “no quiero ninguna orden en su contra” para su pareja, Gemeny Hernández.
La noticia de su pérdida llegó la semana pasada, y aunque el dolor era evidente, Eduardo Antonio decidió mantener sus compromisos profesionales y subir al escenario
En pleno duelo por su madre, Eduardo Antonio decide seguir cantando. “El Divo ahora más que nunca necesita del amor, el cariño y el aplauso de su público”, dice el comunicado.