En cuestión de horas —y en dos ciudades distintas— Margot Robbie y Dakota Johnson volvieron a poner en el centro del debate el ya instalado “naked dressing”: esa corriente de alfombra roja que coquetea con la transparencia, la lencería a la vista y los cortes imposibles. Robbie reapareció en Londres en su primer gran photocall y premiere desde que fue madre recientemente, mientras Johnson deslumbró (y dividió opiniones) en Nueva York con un vestido completamente transparente durante la gala benéfica Caring for Women, indica Yahoo
En Londres, Robbie promocionó A Big Bold Beautiful Journey y llevó dos apariciones virales el mismo día.
Para el photocall, eligió un conjunto rosa “nude” con sujetador estructurado de aire vintage y falda con abertura, un guiño a la estética lencera que WWD Magazine calificó como el “pico” de su juego de estilismo transparente. Más tarde, en el estreno, se plantó con un vestido de Armani prácticamente etéreo, de malla y bordados estratégicos, que dejaba la espalda (y mucho más) al descubierto, confirmando que su retorno a la alfombra roja sería en clave maximalista. Medios de entretenimiento y moda destacaron el movimiento como una continuación de su racha de looks ultrafemeninos y arriesgados.
Del otro lado del Atlántico, Dakota Johnson se sumó a la conversación durante la gala anual de la Kering Foundation —en plena Semana de la Moda de Nueva York— con un vestido firmadísimo por Gucci que era, en esencia, totalmente transparente.
El look, fotografiado desde todos los ángulos, dejaba poco margen a la imaginación y reinstaló el eterno debate sobre dónde trazar la línea entre lo sugerente y lo explícito en eventos benéficos y de etiqueta. La aparición de Johnson coincidió, además, con su momento profesional encendido por Materialists, el romance de Celine Song, lo que amplificó el eco de su elección estilística.
¿Tendencia agotada o capítulo nuevo? Lo cierto es que el “naked dressing” no es un chispazo aislado: viene escalando desde hace temporadas y se cuela en premios, premieres y photocalls por igual. Desde galerías de los Oscar 2024 pobladas de gasas y mallas, hasta estrenos europeos recientes, publicaciones especializadas han documentado cómo actrices de primera línea exploran esta zona limítrofe entre la artesanía de alta costura y la provocación calculada. La lectura: más que “mostrar piel”, se trata de construcción, capas, texturas y patronajes que convierten el cuerpo en arquitectura, reseña Vogue Australia
Entre Londres y Nueva York, Robbie y Johnson aportaron dos tesis distintas de la misma gramática: una, de brillo translúcido y sofisticación de atelier; la otra, de transparencia integral con sello de casa de lujo italiana. A falta de consensos, sí queda una evidencia: la alfombra roja actual premia el riesgo y la conversación posterior. Y en eso, ambas han vuelto a graduarse con una nota BIEN ALTA.
