La partida de Rubén Leliebre ocurre en un momento en que la música cubana ha sufrido la pérdida de varias de sus figuras más reconocidas en los últimos años, dejando la sensación de que un capítulo entero de la historia cultural del país se está cerrando demasiado rápido. Su legado, sin embargo, permanece en cada arreglo, en cada interpretación y en la memoria agradecida de quienes bailaron o se emocionaron con las melodías que él ayudó a construir.
Bebeshito encendió el Kaseya Center de Miami y recibió un emotivo mensaje de Ana Paloma, hija de El Taiger, tras un concierto que también sirvió de homenaje al fallecido reguetonero cubano.
En un contexto donde la censura y la polarización siguen marcando el arte cubano, el encuentro entre La Diosa y Haydée Milanés —una figura vinculada a la trova y otra al mundo popular más urbano— se convirtió en un acto de reconciliación musical. Ambas se rindieron homenaje mutuo, pero sobre todo, le rindieron homenaje a la libertad.
La Diosa de Cuba vuelve a hacer historia en el Watsco Center de Miami con un concierto lleno de emociones, invitados de lujo y un homenaje especial a Pablo Milanés.
Celia Cruz, indiscutiblemente, seguirá siendo la Reina de la Música Cubana, pero Leoni, con 657 almas vibrando a su ritmo en el BigFive, acaba de coronarse en uno de los clubes más simbólicos del exilio cubano. Y lo hizo a su manera: sin estridencias, sin comparaciones, pero con récord.
Este Tony a Mejor Coreografía no solo consagra una colaboración artística exitosa, sino que visibiliza, desde el escenario más importante del teatro estadounidense, el poder cultural de la diáspora cubana. Delgado, como latina, mujer y exbailarina principal del Miami City Ballet, se convierte en referente de una nueva generación de artistas que tienden puentes entre el arte, la identidad y la memoria.
El reparto —a veces también llamado “reparto cubano”— es un subgénero urbano nacido en los barrios de la isla, y que combina bases de reguetón, electrónica y música afrocubana, con letras cargadas de jerga popular, irreverencia y una fuerte impronta local. No es un género que haya contado históricamente con promoción internacional, apoyo institucional ni presencia en festivales ni playlists de plataformas globales. Y por eso la iniciativa de Gente de Zona es tan importante.