Violaciones de derechos humanos, negligencia médica y daños ambientales, esnsombrecen el "funcionamiento" de Alligator Alcatraz. Mientras el gobernador DeSantis se defiende y organizaciones exigen su cierre inmediato.
Eduardo Antonio defiende a los migrantes cubanos recién llegados a EE.UU. y critica a quienes, siendo también emigrantes, los señalan: “Eres un fraude”.
Este caso refleja no solo lo frágil que puede ser la estabilidad de un migrante ante la pérdida de documentos, sino también la fuerza de la comunidad cuando la honestidad y la empatía se anteponen. En un mundo donde muchas veces reina la indiferencia, la rapidez con la que Alexis Pedre recuperó sus papeles es prueba de que aún hay esperanza… y gente buena, incluso en la esquina de una gasolinera.
Testigos afirmaron que la menor cayó accidentalmente desde el balcón y que el adulto —al parecer su padre— no dudó en lanzarse al mar para salvarla. Aunque la compañía Disney Cruise Line confirmó la realización del rescate, no precisó la relación entre ambos pasajeros ni las circunstancias exactas del incidente.
La verdad más verdadera - diría un cubano con pocos estudios - es que esta práctica esta bastante extendida: la de usar la “cascarilla”, esa cáscara de huevo molida que se usa en ciertos rituales de santería y prácticas hogareñas de limpieza espiritual, para arrojar lo malo. Y está tan extendida que, incluso ese gesto aparentemente inocuo, puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza, según el "gesto pictórico" que tuvo lugar recientemente en Florida.
“Alligator Alcatraz” se acerca al final de su construcción, a pesar de la oposición social, las demandas legales y las advertencias ecológicas. Su inauguración en julio 2025 pretende encarnar una postura dura de disuasión migratoria, usando el entorno natural como barrera. Pero su arranque también representa un desafío para las protecciones ambientales y los derechos culturales en los Everglades.
Además de "Alligator Alcatraz", el gobernador Ron DeSantis, refrendado por el fiscal general, explora además otro centro similar en Camp Blanding, cerca de Jacksonville, para reforzar la política estatal de apoyo a la ofensiva federal contra la migración irregular,
Para los chefs y restauradores de Florida, la noticia no es tanto una derrota como un recordatorio de los distintos criterios que rigen en los rankings globales. Mientras tanto, los comensales de Miami y del resto del estado pueden seguir disfrutando de una oferta culinaria premiada, aunque no reconocida (todavía) por The World's 50 Best Restaurants.
Así que sí, Guantánamo y Florida están "a la par": el sargazo no discrimina entre sistemas políticos ni niveles de desarrollo. Al final, todos terminan igual de irritados, mareados y cubiertos de alga.