La administración Trump presentó un escrito ante la Corte Suprema en el caso Exxon Mobil vs. Corporación CIMEX y otras entidades cubanas, en el que reclama que la Ley Helms-Burton permita demandar directamente a empresas del Estado cubano por propiedades confiscadas, sin el paraguas de inmunidad soberana que les reconocen otras leyes federales. El gesto reabre el pulso jurídico y político por las expropiaciones de 1960 y coloca a Washington, otra vez, del lado de quienes buscan castigar económicamente al régimen.