Lejos de las expectativas convencionales, Garr se presentó en roles que requerían una mezcla de vulnerabilidad y astucia, proyectando una imagen que conectó con el público de una manera genuina. Su apariencia y su estilo desinhibido, así como su humor ingenioso, le permitieron redefinir la figura femenina en la comedia y el drama, mostrando que el talento y la personalidad pueden brillar más allá de los estereotipos de belleza de Hollywood